AL-BASIT 66 • PÁGS. 399-442 • INSTITUTO DE ESTUDIOS ALBACETENSES «DON JUAN MANUEL» • ALBACETE • ISSN 2695-6888 (Digital)
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la fabricación y uso de la pólvora (González, 1997, p. 373). Para su
transporte eran necesarias caravanas o «trenes» tirados por caba-
llos o bueyes, que tenían que ir precedidas por grupos de peones
con un maestro al frente para ir reparando o reforzando los cami-
nos, puentes o vados.
Sin embargo, disponer de artillería, tanto para los ejércitos
reales como señoriales, era extremadamente costoso, pero suma-
mente intimidatorio, no tanto por su efectividad, tal y como se verá
en la Guerra del Marquesado (1475-1480) (Pretel, 2002, p. 118),
sino por su valor simbólico. La situación cambia radicalmente a par-
como la «conquista de la artillería» (Castillo, 2004, p. 42).
Entre 2009 y 2010 se realizaron actuaciones arqueológicas
en el interior del Castillo de Chinchilla, como paso previo a la redac-
ción de un proyecto de restauración y rehabilitación de la fortaleza,
que permitieron localizar las dos piezas objeto de este trabajo, de las
que apenas se da noticia al presentar los resultados de los trabajos
arqueológicos (Izquierdo, 2011, p. 169-203). Tan solo se señala que,
junto a las escaleras de la Puerta de la Villa, por su parte interior, se
localizó «un cañón tipo bombarda (característico del S. XV), exhu-
mado frente a las escaleras, al que se sumó la aparición de munición
en piedra» (Izquierdo, 2011, p. 169-203), sin que podamos precisar
si se trata de la bombarda o mortero o de la caña de bombarda, pues
nada se precisa al respecto, al tiempo que falta cualquier informa-
ción sobre la procedencia del segundo ejemplar.
Lo cierto es que ambas piezas son las únicas conservadas de
la dotación artillera que la fortaleza contó en el siglo XV, relacionada
con los acontecimientos bélicos de la Guerra del Marquesado, cuan-
do fue sitiada y estas piezas, junto con otras que se han perdido,
entraron en acción.
Tras la excavación se trasladaron para su depósito al Museo
Provincial de Albacete, donde permanecieron hasta su traslado al
Centro de Interpretación del Castillo de Chinchilla, emplazado en el