Antonio Selva: «El reto del IEA es que sea más visible para la sociedad de Albacete»
Antonio Selva ha sido elegido de nuevo como director del Instituto de Estudios Albacetenses Don Juan Manuel, organismo autónomo dependiente de la Diputación Provincial. Selva comentó a La Tribuna de Albacete distintos aspectos de interés sobre este nuevo periodo, de cuatro años, al frente del Instituto.
¿Ha sido una elección muy disputada?
Hubo una diferencia en torno al 20 por ciento de los votos. Fueron 81 votantes; siete votos en blanco, 44 a mi favor, y 30 de la candidatura de Vicente Carrión. Sí que por el desarrollo de la asamblea, al menos dos personas tuvieron que ausentarse. Es cierto que mi electorado, hablando en términos que no corresponden al Instituto, es más joven y tenían compromisos familiares o participaciones en congresos, y era consciente de eso, pero al final los números quedaron ahí.
¿Victoria suficiente que avala una gestión?
En junio de este año se lo dije a Vicente Carrión, cuando me habló de que le estaban empujando para que se presentase. Comenté que éramos suficientemente adultos para saber si nos presentaríamos o no. La cuestión es que si uno u otro sacaba un voto más sería director, no hay más. Es mejor un resultado así, porque otro más desequilibrado posiblemente haría daño.
¿Hay perfiles diferentes en los votantes del Instituto?
Estimo que sí, pero claro el voto es secreto. Hay personas que se excusaron y preguntaron si había voto delegado o por correo. Hace un año, cuando se modificaron los estatutos, me planteo seriamente continuar. Teníamos un primer recorte presupuestario y veía que esto iba a ser duro, y podía haber salido por la puerta grande, eso hubiera sido lo bonito, pero había otros compañeros que me animaron a seguir, porque además esta crisis sabíamos que iba para largo. Entonces, ¿cómo afrontamos la nueva etapa de una institución no demasiado visible, que la sociedad no percibe como algo necesaria, y que puede estar sometida incluso a la supresión?
Esa era la idea
Entre otras. Es algo que se percibe como útil para la sociedad o la obligación de cualquier gobernante es no gastarse el dinero. El convencimiento de nuestro equipo es éste, entendemos que la cultura es una inversión que en el futuro producirá una rentabilidad y digamos que es la idea, pero para gestionar en estos momentos de crisis tienes que tener criterios y una formación. Yo pongo como valor haber estado al frente de una entidad financiera durante 25 años y eso me permite saber algo de cómo gestionar, además, durante esos años gestioné la parte cultural de la entidad. Como decía, un pueblo sin cultura no puede vivir, y el Instituto investiga sobre los temas de Albacete y hace que la gente valore lo que tiene, pero al mismo tiempo puede servir como recurso turístico, para que la gente venga y conozca lo que es que es Albacete a través de las publicaciones, exposiciones, conferencias o intervenciones de los miembros del Instituto fuera.
¿Es un reto entonces?
Sí, un reto para los próximos años, porque creo que el Instituto es algo más conocido, pero el reto es que el IEA sea más visible para la sociedad de Albacete. En definitiva, si digo que la cultura es una inversión, habrá que ver de qué forma la sociedad percibe que realmente lo es, eso es difícil, pero hay que hacerlo y además prestando la atención especial a los jóvenes. Hemos optado a la dirección del Instituto dos personas que tenemos 60 años, cuando el Instituto se creó, hace 34, con ocho miembros fundadores que estaban entre los 29 o 30 años. Hay ahora una situación económica que hace que todo lo que son trabajos de los alumnos de la Universidad posiblemente no tengan vías de difusión o publicación, y ahí estará el Instituto, por lo que hemos pensado en algo muy concreto. El IEA tiene un remanente de tesorería de 129.000 euros, porque en época de 'vacas gordas' hemos ahorrado, gastamos sólo lo necesario. Lo que plantamos con ese remanente es fraccionarlo a una media de 24.000 euros por año, sólo para ayudas a la investigación, pero dejaremos algo todavía. Buscaremos además financiación externa para los premios a la investigación, porque el Instituto siempre se ha nutrido de la aportación de la Diputación y algo de las publicaciones. Un nuevo capítulo será esa financiación externa.
¿Es posible esta línea?
Sí, hay una entidad financiera con la que ya hemos hablado que estaría dispuesta a patrocinar los premios de Ciencias Naturales y el de Ciencias Jurídicas y Económicas. Otra, posiblemente apoyaría otros dos premios.
Deben ser ustedes únicos, tienen en estos tiempos remanente de tesorería.
Sí, porque venimos haciendo lo mismode siempre, no tiramos la casa por la ventana.
¿Hay presupuesto?
Se negocia de año en año y ahora tenemos reuniones y lo afrontaremos sin que para nada se recorten capítulos propios de la actividad, pero eso hay que verlo con la Diputación.
¿Cambiaría la filosofía de las publicaciones?
Hablamos de libro electrónico, pero hay un error de partida, parece que va a desaparecer el papel, nada de eso. Lo que haremos es editar en cantidades superiores a la demanda real, con la posibilidad de hacer impresiones bajo demanda, pero la maquetación permite colgar una publicación inmediatamente en la página del Instituto, con eso conseguiremos reducir costes y aumentar la difusión.
Hablando de difusión, ¿seguirán trabajando?
Somos muy conocidos en el ámbito científico, pero por la ciudadanía no tanto. Cuando trasladamos la Biblioteca empezó a venir gente y percibimos que cuando empiezan a perder el miedo a venir, encuentran aquí todo lo relacionado con Albacete y además un personal altamente cualificado, y si somos capaces de aumentar la colaboración con la Universidad, para que los trabajos vean la luz a través del Instituto, junto con becas y líneas de investigación que vinculen UCLM con el IEA, creo que nos haremos más visibles. También tenemos que fomentar los lazos con asociaciones culturales, para que, cuando organicen actividades, sepan que el Instituto y sus miembros estarán ahí, sin coste alguno y también así conocerán el IEA. Desde que colocamos online revistas, publicaciones, libros, han subido las visitas de manera exponencial, pero nos falta aún incrementar este apartado y también hemos hablado de enlazar con el buscador de la Biblioteca virtual de Castilla-La Mancha. Hablamos de la recuperación de los estudios de literatura de tradición oral, una propuesta que enlaza con la gente que está haciendo Zahora.
¿La apuesta?
La apuesta, que el Instituto sea percibido por la sociedad como nosotros, que estamos dentro creemos que es, un instrumento útil para el desarrollo de Albacate y su provincia
